“Un
día de trabajo en
el gasolino.”
El Bote de Erandio
El bote de
Erandio empezó a funcionar en el año 1900 o 1906, su nombre como empresa ha
cambiado varias veces, lo que no ha cambiado con el tiempo es su trayecto.
Actualmente la plantilla de esta empresa consta de 33 trabajadores y 4 botes.
En el
embarcadero de Erandio.(foto
de archivo)
Antonio es
uno de los trabajadores, lleva trabajando en la empresa algo más de 30 años,
gracias a él puedo contaros ciertos datos y disponer de fotos que sin su colaboración
no hubiese sido posible.
El bote
funciona y ha seguido funcionando durante estos años, tiene sus
incondicionales, que siguen utilizando este medio de transporte, pero lo que en
realidad afecta al número de pasajeros, es el trabajo.En momentos de crisis como
el actual, el trabajo escasea y eso repercute, como dice Antonio "
No es el
tiempo o las estaciones del año lo que afecta al número de viajeros, es el que haya
más o menos trabajo".
Su horario
de trabajo es de lunes a viernes, trabaja a turnos, en jornadas comprendidas
entre las 5:30 de la mañana y las 21:30. El precio del billete es de 1 euro,
disponiendo también de bonos de 30 viajes en los que te ahorras un 10% del
precio. Festivos no trabaja, excluyendo días en que haya algún evento especial.
En el mismo bote organizan despedidas, tambiénse realizan salidas especiales en
las fiestas de Bilbao para ver los fuegos artificiales desde la embarcación.
Como dato
curioso, saber que "el gasolino" fue el único medio de transporte que
no dejó de prestar sus servicios uniendo ambas orillas en las inundaciones que
sufrió Bilbao en el 1983, hubo de cerrar un par de horas algún día posterior a
las inundaciones, pero el peligro no estaba en la crecida de la ría, sino en todo lo
que ella arrastraba.
A lo largo
de estos años han podido contar con la presencia de diversos animales, que se
han dejado ver por la ría y cerca del bote, como focas, delfines y jibias
grandes entre otros.
Una jibia
pescada por uno de los trabajadores(foto de archivo)
.Una foca,
también contaron con su presencia. (foto de archivo)
Lo primero antes de comenzar otrajornada, es
echar un vistazo a las embarcaciones que han pasado la noche amarradas, a la
espera de un nuevo día de trabajo.
Imagen
tomada desde el embarcadero de Erandio.
Hay que
echar un vistazo, para que todo esté en orden antes de comenzar.
De camino al
lugar de salida.
Ya comienza
la gente a aparecer para poder cruzar a la otra orilla.
El bote nos espera.
Vendiendo un
billete al primer pasajero de la jornada.
Nada más montar en la embarcación nos encontramos con los botes de reserva amarrados.
el gancho que sujeta la embarcación.
Nos reciben con una amable sonrisa
Barakaldo a la izquierda y Erandio a la derecha.
Nada más montar en la embarcación nos encontramos con los botes de reserva amarrados.
el gancho que sujeta la embarcación.
Un bonito contraluz.
La otra orilla.
Detalle de la cabina.
El interior de la parte cubierta del bote.
El trayecto es corto, apenas tres minutos.
Llegada a Barakaldo, fotografía hecha desde el embarcadero.
La otra orilla.
Detalle de la cabina.
El interior de la parte cubierta del bote.
El trayecto es corto, apenas tres minutos.
Llegada a Barakaldo, fotografía hecha desde el embarcadero.
Los
salvavidas, situados en la parte superior de la embarcación.
Vista de
Erandio desde el Embarcadero de Barakaldo.
La jornada de trabajo puede ser dura y
monótona, pero no cabe duda que para el pasajero el trayecto puede ser muy
diferente y agradable.
Elvira Gallego - 1 Lim
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